Las primeras civilizaciones
Surgimiento de las primeras civilizaciones en la historia entre los años 3500 y 500 a. de C. en Mesopotamia, Egipto, Valle del Indo y China. Estas civilizaciones comparten muchas características en común las que serán definitorias a la hora de establecer su carácter como tales:
Surgen en zonas fluviales, junto a valles fértiles de los ríos. Desarrollan importantes obras de infraestructura como represas y canales de irrigación para aprovechar con mayor eficiencia las aguas en periodo de sequías o grandes inundaciones.
La agricultura es así la actividad económica principal aunque rápidamente surgen otras destinadas a satisfacer la demanda de su creciente población: minería, artesanía y comercio.
La localización de las actividades económicas permite el desarrollo de ciudades que serán importantes centros políticos, religiosos y económicos.
Políticamente se organizaban en Monarquías Teócraticas, centralizadas y con una estructura altamente jerarquizada, ala cabeza de las cuales estaba el Rey, que en la mayoría de los casos, tenía atribuciones divinas. Así surgen los estados con regulaciones normativas y administrativas tendientes a regular la vida de la población.
Desde el punto de vista religioso eran politeístas, con un alto grado de adoración de las fuerzas de la naturaleza.
Desarrollan la escritura como herramienta fundamental en la administración del estado.
Aparecen formas de estratificación social ligadas al desarrollo de las diferentes actividades económicas, religiosas y administrativas.
De los anteriores, los elementos que configuran y constituyen una civilización son el surgimiento del estado, las ciudades y la capacidad de generar tecnología que se traduce en enormes obras de infraestructura. El desarrollo de expresiones culturales por si mismo no basta para enmarcar a una comunidad en la categoría de civilización, aunque estas presenten signos de gran desarrollo y evolución.
Las civilizaciones tienen carácter evolutivo y se manifiestan como un proceso de larga duración en el tiempo.
En la actualidad en el mundo existen varias civilizaciones todas ellas herederas de estos primeros focos civilizadores
Surgimiento de las primeras civilizaciones en la historia entre los años 3500 y 500 a. de C. en Mesopotamia, Egipto, Valle del Indo y China. Estas civilizaciones comparten muchas características en común las que serán definitorias a la hora de establecer su carácter como tales:
Surgen en zonas fluviales, junto a valles fértiles de los ríos. Desarrollan importantes obras de infraestructura como represas y canales de irrigación para aprovechar con mayor eficiencia las aguas en periodo de sequías o grandes inundaciones.
La agricultura es así la actividad económica principal aunque rápidamente surgen otras destinadas a satisfacer la demanda de su creciente población: minería, artesanía y comercio.
La localización de las actividades económicas permite el desarrollo de ciudades que serán importantes centros políticos, religiosos y económicos.
Políticamente se organizaban en Monarquías Teócraticas, centralizadas y con una estructura altamente jerarquizada, ala cabeza de las cuales estaba el Rey, que en la mayoría de los casos, tenía atribuciones divinas. Así surgen los estados con regulaciones normativas y administrativas tendientes a regular la vida de la población.
Desde el punto de vista religioso eran politeístas, con un alto grado de adoración de las fuerzas de la naturaleza.
Desarrollan la escritura como herramienta fundamental en la administración del estado.
Aparecen formas de estratificación social ligadas al desarrollo de las diferentes actividades económicas, religiosas y administrativas.
De los anteriores, los elementos que configuran y constituyen una civilización son el surgimiento del estado, las ciudades y la capacidad de generar tecnología que se traduce en enormes obras de infraestructura. El desarrollo de expresiones culturales por si mismo no basta para enmarcar a una comunidad en la categoría de civilización, aunque estas presenten signos de gran desarrollo y evolución.
Las civilizaciones tienen carácter evolutivo y se manifiestan como un proceso de larga duración en el tiempo.
En la actualidad en el mundo existen varias civilizaciones todas ellas herederas de estos primeros focos civilizadores
